Documental filmado en 24 países que narra, en términos eminentemente visuales, aurales y musicales, la evolución de la Tierra y de la Humanidad, al mismo tiempo que señala las formas en que el ser humano se ha relacionado con su medio ambiente. La aparente fragilidad de la vida humana es contrastada con la grandeza de sus obras, al mismo tiempo que se subraya la desigual relación entre hombre y naturaleza. En medio de estos contrastes, la espiritualidad de la humanidad surge como el elemento más importante que la distingue de otras especies.
es un documental de vanguardia lanzado a las pantallas en 1992,El destino de la obra literaria y cinematográfica suele ser narrar la unidad de una historia. Pero el cascabel de la narración puede sonar en otra superficie: la del tejido de las muchas historias, de los muchos lugares, de los muchos cultos y creencias, de las muchas culturas. Es esta, quizá, una cima más ambiciosa para el relato. El relato de la realidad polifónica.
En nuestra esfera planetaria, lo real es concierto de naturaleza y cultura. En la narración de esta textura del mundo nace Baraka, un documental de vanguardia que continua el narrar múltiple iniciado por un ex sacerdote que vivió bajo el voto del silencio: Godfrey Reggio. Reggio concibió un lenguaje experimental en Koyaanisqatsi y Powaqqatsi. Dos creaciones donde sólo dicen las imágenes y los sonidos. Nunca irrumpe ninguna voz humana. En la primera de estas obras de experimentalismo documental se contraponen la antigüedad, grandeza y soledad de la naturaleza con el vértigo apabullante de las grandes ciudades. Esta experiencia fue continuada luego en Powaaqqatsi, donde la red, el tejido, de los muchos lugares y las escenas del tiempo febril de las ciudades se integran con la desolación, la explotación y la pobreza de varios sitios del planeta. Baraka es palabra sufí, cuya traducción sería bendición, aliento o esencia de la vida. Hacia paisajes más profundos del tiempo se abre este documental donde sólo fluyen la imagen y el sonido. En ningún momento la voz humana explica o guía el devenir visual.
KOYAANISQATSI
creaciones donde sólo dicen las imágenes y los sonidos. Nunca irrumpe ninguna voz humana.
En Koyaanisqatsi, Reggio tuvo como director de fotografía a Ron Fricke. Fricke será luego el hacedor de Baraka, la nueva explosión sensorial hacia los hilos múltiples del gran tejido de la cultura y la naturaleza.
1 comentario:
Me conmovió ver simplemente en caras de las personas y hacer que mirar hacia atrás de mí, que me permite conectar con la universalidad del espíritu humano.
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